“Como Sara obedecía a Abraham, llamándole señor; de la cual vosotras habéis venido a ser hijas, si hacéis el bien, sin temer ninguna amenaza. Vosotros maridos, igualmente, vivid con ellas sabiamente, dando honor a la mujer, como vaso más frágil y como coherederas de la gracia de la vida, para que vuestras oraciones no tengan estorbo” 1 Pedro 3: 6 – 7
Existen muchos conceptos de vida que se han tergiversados y que para muchos han traído confusión y perdida de dirección, así por ejemplo, tenemos las corrientes de pensamientos machistas, feministas, de género entre otros, y dependiendo lo que cada uno crea, esto será lo que aplique en su diario vivir.
Es importante resaltar lo que dice la Palabra de Dios sobre el matrimonio y la importancia de la oración como parte de una relación inseparable. La relación de Sara con Abraham, fue una relación tan normal como lo son las relaciones entre la mayoría de las parejas, es decir, existen momentos en que uno se deja guiar por el otro y en otras ocasiones es a la inversa. No crean que siempre Sara fue obediente, en ocasiones también desobedeció. Y no piensen que Abraham fue un gran bonachón, porque no fue
así.
Sin embargo a estas realidades, existía entre ambos una relación en alto porcentaje armoniosa y dirigida por nuestro Dios.
Esto hizo que al sacar conclusiones de ellos como pareja, los resultados fueron los de una pareja digna de ejemplo, ya que su matrimonio permaneció inseparable.
Pongamos las cosas en su lugar: tener obediencia, sumisión, ayuda idónea significa que estamos claros en nuestras responsabilidades, que estamos seguros de lo que somos y de lo que tenemos que brindar a los demás.
Observe que cuando la Palabra de Dios habla de este tema, dirigiéndose a la mujer, lo concluye diciendo que si hacéis el bien, no tiene por qué haber amenazas. Dios nos pone otra condición y esta vez para los hombres, nos pide que seamos sabios con nuestra esposa, que la tratemos con ternura y que esto es condición para que nuestras oraciones no tengan estorbo.
Así que si yo quiero ser escuchado por Dios, debo ser sabio con mi esposa y tratarla con ternura.
Peticiones de oración
Tener los conceptos correctos de acuerdo a la Palabra de Dios.
Para que Dios cambie nuestro lenguaje áspero, por uno agradable y tierno.
Por sabiduría siempre, Dios dice que la pidamos.